“Lo que ha escrito un ser humano, lo puede entender otro ser humano” Axioma único de la Escuela de la Traductores de Sirventa.Folio 50 del Códice de Dresde. Tablas de Venus.
¿Hasta dónde eran capaces de observar el cielo los astrónomos Mayas?
-Independientemente de las especulaciones galácticas o fantasías heroicas sobre la cultura Maya de los nuevos escritores sobre el tema, disponemos de algún documento escrito en puño y letra por parte de los mismos sacerdotes astrónomos que habitaban Chichen Itzá en el tiempo de su máximo esplendor, que nos permiten conocer de primera mano que es lo que sabían hacer los Maya.
El Códice de Dresde es un manuscrito compuesto por 74 tablas de las cuales más de la mitad no han sido descifradas. Ni rusos, ni estadounidenses, ni alemanes ni sajones, han sabido leer al completo lo que hay ahí escrito, porque para comprender ese manuscrito es necesario tener la mentalidad de un astrólogo, de otro modo es imposible.
Vamos a descifrar una de las estampas más importantes del Códice Dresde, la que encontramos dentro del fragmento de las tablas de Venus.
Para poder descifrar cualquier glifo o imagen en cualquiera de los calendarios jeroglíficos de los Mayas, conviene hacer con la mente, lo que se hacía con las caballerizas, que se les ponía orejeras para que sólo puedan mirar hacia adelante.
Vamos a observar la imagen central del folio 50 por ser una imagen reconocida a la que le asignan un nombre propio y la asocian con el numen o la deidad de Venus o Tlahuizcalpantecutli, y obviar todo lo demás………de momento.
Los astrónomos Maya miraban al Sol directamenhte y eran capaces de calcular y de observar el paso de Venus y Mercurio sobre el disco solar. ¿Cómo lo hacían? Esa fue la primera fase de investigación. ¿Cómo miraban el Sol los astrónomos Maya?
Con espejos de agua. Aún hoy día se conserva la costumbre de tener espejos de agua dentro de las casas..-El Palacio de Tetitla de Teotihuacan está lleno de espejos de agua para iluminar la casa por dentro con el reflejo de la luz de la Luna y de las estrellas.
En la cultura mesoamericana aún queda la costumbre de llenar un barreño, tipo lebrillo de barro, de agua y sacarlo por la noche a la serena para mirar el cielo en el reflejo del agua del barreño, igual que en la cultura de la vieja Mesopotamia, donde se usaban unos recipientes circulares de piedra oscura; mármoles o grafitos, o lacadas en color negro, que se llenaban de agua y en su superficie observaban el cielo. Observar el cielo a través del reflejo sobre el agua era común en ambas culturas.
Además los Maya tenían un espejo secreto, un espejo cóncavo de obsidiana que permite ver el Sol directamente a un tamaño considerable y distinguir manchas solares y sobre todo, los pasos de Venus o de Mercurio sobre el disco solar, tal y como podemos ver algunas estampas jeroglíficas como las que nos ocupa ahora.
Para analizar esta imagen o cualquier otra imagen, glifo o dibujo, primero que nada hay que trascribirlo, es decir volverlo a escribir, es este caso dibujarlo de nuevo, pues al hacerlo existen muchas más posibilidades de entender lo que hay escrito, que si uno se queda delante mirando como un pasmarote.
Al dibujar de nuevo la imagen surgen detalles que hubiera sido prácticamente imposible percibir sin hacer el trabajo de transcribir el dibujo original y ser meticuloso en la trascripción.
¿Qué hay de especial en la imagen? Lo más destacable simple vista es que el numen de Venus tiene los ojos tapados y en la mano lleva dos atlalt o lancetas que parece que se las quiere clavar a alguien.
¿Qué nos esta diciendo aquí el balam, el sacerdote astrólogo? Que lo que sea a lo que quiere clavarle la lancetas la deidad de la imagen en cuclillas, ciega los ojos..Algo que ciega, algo que ciega es el Sol, mirar al Sol ciega la vista, luego se refiere a clavarle las lancetas al Sol.
Dos veces ¿por qué dos veces? Porque cada vez que pasa Venus sobre el disco solar lo hace dos veces, con una separación de ocho años. Luego tienen que transcurrir más de cien años para que vuelva a pasar Venus sobre el Sol.
Las conjunciones inferiores del Sol significan para los Maya el inicio de una Era, en el caso de esta Era se trata de la Era del Conejo, pero de eso hablaremos en otro momento.
¿Pero de qué conjunción se trata? La cosa era difícil, pero tengo la suerte de tener a mi amigo Miguel García Ferrández a mano y él me facilitó los datos de las fechas en las hubo eclipses de este tipo en los últimos mil años y de ahí deduje que se trata del eclipse de Venus sobre el Sol que ocurrió en el año 1040, pues al descubrir el dibujo que muestra el eclipse, observé que el astrónomo Maya indicaba que se trataba de un paso de Venus por un lateral del Sol, como el de 1040.
Para desvelar esta parte del dibujo tuve que ampliar un fragmento de las lancetas en las que hay un dibujo oculto tras las flechas.
Detrás flechas se dibuja un pequeño circulo que representa al Sol y una bola negra que representa a Venus pasando por el borde del Sol.
Eso es lo que nos está diciendo el sacerdote astrólogo artista que dibujó la imagen de Tlahuizcalpantecutli llevando dos “banderillas” con los ojos tapados para no cegarse mientras le clava sus atlalt al Sol y da nacimiento a una nueva Era.