El trígo de la Luna y Venus, cuando el cielo modela a las personas encantadoras.

La influencia astrológica no siempre son cosas malas, el que sean buenas o malas dependen de los planetas que entren en juego. Piensa que los planetas son como los personajes de un pueblo. -Hay uno que viste de negro, como el árbitro, controlando por aquí y deteniendo el juego por allá, es el típico mala sombra del pueblo, que siempre los hay, y siempre va a estar. Saturno es ese de negro que siempre quiere poner reglas y normas, parecen Moisés con la tabla de piedra vestido de negro. Es horrosoro están por todas partes, son como el agente de Matrix, que es el mismo, pero salen muchos. Y si se junta con Marte o con Plutón, formado aspecto con la Luna, ya tenemos montado el follón, y es que los tres son maléficos y cuando forman mal aspecto con la Luna dañan todo lo que pueden.

Ahora bien, si hablamos de Venus la cosa cambia mucho, porque Venus es un planeta «benéfico» y cuando Venus forma trígono con la Luna, nacen personas con gracia, con cualquier tipo de gracia. Con el trigono de Venus a la Luna suelen aparecer las personas más «encantadoras», en el má ampliosntido de la palabra, o bellas, algunas mujeres, no todas, suelen ser personas de una belleza excepcional, con un atractivo especial, un encanto personal muy destacado. Es tan fuerte esta buena influencia que, en muchos casos, no siempre, se puede notar hasta en su aspecto físico donde la diosa Venus se apodera de la mujer y adquieren una naturaleza seductora con una belleza por encima de lo normal.

Hay muchos casos donde en la influencia del trigono de Venus se potencia a la Luna, y aparecen personas que destacan por su capacidad de proteger y de generar vida social, como lo hace una buena madre con sus hijos. Hay mujeres «grandes» que tienen este aspecto y han destacado como grandes políticas y gobernantes insuperables por su capazidad de empatizar con su pueblo y su buena gobernanza. – Claro que, como he dicho siempre, la influencia astrológica no tiene ética ni moral y a veces se meten en el mismo saco, zorras y conejos.

En general se trata de personas que destacan por sus modos, sus risas y su pulcritud, lo que hacen que sean personas agradables y seductoras. Rodolfo Valentino, que tambien tenía el trino, es buen ejemplo de ello.

Generalmente se dice que es el signo del seductor-a, su donaire, gracia o buena sombra les permite moverse con cierto garbo por todas las capas sociales. Son personas que saben entretener, distraer, interesar o alegrar cualquier reunión.

Muchos de ellos, no todos, son cariñosos, compasivos, dulces y amables en sus comportamientos íntimos. Estas dotes naturales hacen de ellos personas muy queridas o populares. Lo peor de esta configuración puede ser la necesidad de tener un segundo amor o la búsqueda de diversiones fuera del hogar.

En ciertos momentos se les puede reconocer por su risa, su belleza o su sentido del humor que suele estar extremadamente desarrollado, aunque no todo el mundo comprenda su humor o sus bromas.

Que tienen atractivo social, eso nadie lo puede negar, ni la Heba, ni el Laden serían nada sin ese atractivo especial, para quienes resultan atractivos. -La Heba tiene muchos «adeptos» en el país de los patagones y mira que la tía es fea, pero ya ves, el cielo no distingue sexo, raza, ni credo.
Publicado por Tito Maciá

Profesor, divulgador, investigador y escritor sobre temas de astrología.
https://titomacia.net/

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